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| Pedro Milani, Carlos Santos, Manuel García Ferré y Pablo Bruera |
El sábado 17 de noviembre por la
tarde la Cátedra Libre de Cultura Andaluza participó del emotivo homenaje que Manuel
García Ferré, el creador de tradicionales personajes infantiles argentinos como
los emblemáticos Hijitus y Anteojito, tuvo en la República de los Niños. La
ceremonia, que contó con la presencia del intendente Pablo Bruera y de numerosas personas que se acercaron al
predio de Gonnet, consistió en denominar con el nombre de García Ferré al Paseo
de la Historieta, pero además se descubrió una escultura de Hijitus realizada
por el artista plástico Pedro Milani, la que se suma a otros personajes que ya
estaban en esa calle del predio infantil.
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| García Ferré junto al Intendente Pablo Bruera y Carlos Santos |
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| María Engracia Picón Pérez, Carlos Santos, García Ferré y G. Pilía |
Bruera distinguió como Huésped de
Honor al artista gráfico, mientras que Carlos Santos Valle, presidente del
Consejo Argentino para las Relaciones con Andalucía y miembro de la Cátedra, le
hizo entrega a Ferré de una plaqueta testimonial del Instituto de Estudios
Almerienses de la Diputación Provincial de Almeria, ciudad de la que es oriundo
el historietista de 83 años. Semanas atrás, García Ferré había recibido en su
estudio de Buenos Aires la designación como Miembro de Honor de la Cátedra y
del Consejo. Emocionado, Ferré dijo que "no tenemos que matar al niño que
todos llevamos adentro; es importante tener siempre ilusiones, porque las
ilusiones son las que nos mantienen jóvenes. En mi vida pasé momentos muy
difíciles, cuando llegué a Argentina a los 17 años era un linyera y por eso
Hijitus tiene como juguete unos tarros que lleva atados, pero siempre traté de
ver el vaso medio lleno, y todavía tengo proyectos".
Antes de su regreso a Buenos
Aires García Ferré tuvo oportunidad de compartir un café con los miembros de la
comunidad andaluza presentes y las autoridades municipales y de realizar una
recorrida por el predio, especialmente por el Museo de los Muñecos, sobre el
que tuvo palabras de elogio, y por el Patio de los Leones, que reproduce a
escala el que existe en la Alhambra de Granada. La recorrida se vio
frecuentemente interrumpida por las familias que habían concurrido al parque y
que, al reconocer al popular creador, deseaban fotografiarse con él.
