Guillermo Pilía, el Juez Baltazar Garzón y Carlos Santos |
El ex juez español Baltasar
Garzón Real fue declarado Miembro de Honor de la Cátedra Libre de Cultura
Andaluza de la Universidad Nacional de La Plata y también del Consejo Argentino
para las Relaciones con Andalucía “por su invalorable contribución a la defensa
de los Derechos Humanos y la difusión de los valores universales de la
idiosincrasia andaluza, en nombre de los andaluces nativos y adoptivos de la
Argentina, nutridos con su ejemplo de honestidad y justicia”. La distinción le
fue entregada por los titulares de ambas instituciones, Guillermo Eduardo Pilía
y Carlos Santos Valle, el día 31 de octubre a las 17, en el edificio anexo del
Honorable Senado de la Provincia de Buenos Aires (Avenida 7 esquina 49). El
vicegobernador de la provincia, Gabriel Marioto, resaltó la procedencia
andaluza de Baltasar Garzón y cerró su presentación dedicándole un poema de
Raúl González Tuñón sobre el fusilamiento de Federico García Lorca.
A su turno, Baltasar Garzón aseguró
hoy que “Argentina es el único país del mundo donde el trinomio verdad,
justicia y reparación, se cumple de verdad. No hay otro país que haya sufrido
el horror del terrorismo de Estado y la persecución y que haya enjuiciado a los
responsables, reparado a las víctimas y buscado y peleado la verdad”. El
jurista resaltó la “construcción de la memoria colectiva y la concientización”
de los ciudadanos argentinos “que con esfuerzo y sin violencia removieron las
conciencias para romper los muros de la impunidad”. También consideró como una
“dicha” haber podido contribuir a que la impunidad en Argentina fuera menor a
partir de las investigaciones que realizó en España cuando era juez, aunque
sostuvo que “sin el apoyo de las víctimas y las organizaciones de derechos
humanos aquella aventura no hubiera sido posible”. Respecto a los crímenes
cometidos en España por el franquismo, afirmó que “hubo jueces que dieron todo
para que el procedimiento acabara y fiscales que se negaron a investigar y que
dijeron que fue una historia discutible, además de no contar con el apoyo del
gobierno”. En referencia a la situación actual explicó que “vivimos tiempos difíciles
pero de esperanza, con una situación similar a la que vivió Argentina y que
superó con fortaleza y con confrontación importante hacia los mecanismos
internacionales de intervención”.
Baltazar Garzón recibiendo el diploma de manos de Guillermo Pilía y Carlos Santos |
Baltasar Garzón nació en Torres,
Jaén, en 1955. Hizo el bachillerato en el Instituto Santísima Trinidad de Baeza
(ciudad en la que ejerció la docencia Antonio Machado) y se licenció en Derecho en la Universidad de
Sevilla. Su primer destino como juez fue
Valverde del Camino, Huelva. Posteriormente, fue trasladado a Villacarrillo,
Jaén y en 1983 ascendió a magistrado, siendo destinado al Juzgado de Primera
Instancia e Instrucción n.º 3 de Almería. En 1987 se le nombró inspector
delegado para Andalucía del Consejo General del Poder Judicial y al año
siguiente tomó posesión como magistrado del Juzgado Central de Instrucción n.º
5 de la Audiencia Nacional. También ha sido profesor de Derecho Penal en la
Universidad Complutense de Madrid y ha escrito varios libros. En la década del
90 comenzó a tomar notariedad por su intervención en causas por crímenes de
lesa humanidad cometidos por las dictaduras latinoamericanas, pero fue
destituido cuando intentó investigar las violaciones a los derechos humanos
cometidas por el franquismo.